Aves marinas del Golfo Dulce: ¿Qué sabemos acerca de ellas?

Observar aves es quizás una de las actividades más populares realizadas por los visitantes de Playa Cativo Lodge. En la zona, que incluye los alrededores de la Península de Osa, el Parque Nacional Piedras Blancas, y Golfito, se pueden observar más o menos 400 especies de aves de las más de 930 registradas a la fecha para Costa Rica. Si pensamos en la observación de aves en Costa Rica nuestra mente nos lleva inmediatamente a un sendero terrestre, con los binoculares enfocando tucanes, tangaras y colibríes. Pero ¿Qué tal si hablamos sobre aves marinas? ¿A cuáles especies en particular nos podemos referir?

Un estudio reciente brinda un panorama general del estado de la diversidad de aves marinas del Golfo Dulce. Los resultados de “Una lista actualizada de aves marinas (Aves) del Golfo Dulce, sur de Costa Rica” indican que la avifauna marina del Golfo Dulce está compuesta por 73 especies en 16 familias. Veinte especies son residentes y 50 son migratorias del Neártico. Dos especies tienen poblaciones residentes y migratorias, y una es una migrante reproductora. En esta lista obtenida entre el 2007 y el 2023, cuatro especies están clasificadas como Casi Amenazadas a nivel mundial por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN)1.

Las aves marinas se definen como aves que pasan al menos una parte de su vida en un hábitat marino: áreas costeras, islas, estuarios, humedales e islas oceánicas2. En consecuencia, las aves marinas se clasifican en tres grupos:

  • Aves oceánicas: son especies coloniales que se alimentan en aguas saladas y a menudo migran largas distancias desde sus zonas de reproducción hasta sus zonas de invernada. En algunos casos, estas aves pueden conectar ambientes marinos geográficamente diferentes. Este grupo incluye las aves del trópico (familia Phaetontidae), los petreles y pardelas (familia Procellariidae), las fragatas (familia Fregatidae), los piqueros (familia Sulidae), los cormoranes (familia Phalacrocoracidae), los pelícanos (Pelecanidae), los ostreros (familia Haematopodidae), los págalos (familia Stercorariidae), y las gaviotas y charranes (familia Laridae). 
  • Aves playeras pasan su vida en playas arenosas, marismas y orillas de ríos y lagos, y generalmente solo interactúan con el borde del ambiente marino. Este grupo incluye las avocetas (familia Recurvirostridae), los chorlos, chorlitejos y avefrías (familia Charadriidae), y los zarapitos, agujetas, vuelvepiedras, andarríos, falaropos, y correlimos (familia Scolopacidae).
  • Aves acuáticas habitan y se alimentan principalmente en agua dulce y generalmente interactúan con el medio marino sólo en la zona costera. Este grupo incluye los cigüeñones (familia Ciconiidae), los patos aguja (Anhingidae), las garzas y garcetas (familia Ardeidae), y los ibises y espátulas (familia Threskiornitidae). 

Según los resultados del estudio, la familia de los zarapitos, agujetas, vuelvepiedras, andarríos, falaropos, y correlimos (Scolopacidae) fue la más abundante, lo cual es esperado debido a la idoneidad de los hábitats costeros en el Golfo Dulce como zona de alimentación para este grupo de aves. Estas aves se congregaron en los manglares de los ríos, con concentraciones más altas en las desembocaduras de los ríos Esquinas, Coto Colorado y Tigre, y en Playa Azul, una larga playa arenosa cerca de la Bahía de Golfito. Además, en estos sitios de congregación se observaron las cuatro especies cuyo estado de conservación por la UICN es catalogado como Casi Amenazado; la garceta rojiza (Egretta rufescens), el charrán elegante (Thalasseus elegans), el correlimos semipalmeado (Calidris pusilla) y el chorlo nevado (Charadrius nivosus).

Un listado de especies, algo que todos los observadores de aves hacen cada vez que salen a observar, parece algo muy sencillo, pero esconde un valor único cuando aporta información a través del tiempo. Las aves, como indicadoras de la calidad del ambiente, permiten analizar cambios en los ecosistemas, ya sean de origen natural o antropogénico. Los efectos del cambio climático, que se espera impacten las zonas marinas y costeras hacen esencial comprender la distribución de las aves en estos ambientes en un marco temporal. Las listas de especies pueden proporcionar información confiable sobre los cambios en las poblaciones de aves, fenología y patrones geográficos y climáticos, lo que constituye información requerida para formular estrategias de manejo y conservación.

Existen varios estudios relacionados con aves terrestres en los bosques que bordean el Golfo Dulce, además de programas de monitoreo bien establecidos. Sin embargo, los estudios y la investigación sobre aves marinas en el Golfo Dulce son marginales, a pesar de su importancia biológica para las aves. La única información con la que se contaba hasta el 2023 era una lista de especies recopilada por el Instituto Nacional de Biodiversidad a través de las Unidades Básicas de Información (UBI) en 1998; es decir, ¡Una lista que ya tenía 25 años de antigüedad!

Gracias al uso de herramientas modernas de ciencia ciudadana, como la plataforma digital eBird, y datos obtenidos de los Conteos de Aves de Golfito (en dos rutas marinas), se pudo recopilar información, actualizar, comparar, y verificar las especies registradas en la lista UBI. Además, se utilizaron datos de observaciones incidentales para documentar algunas especies raras3. Con estos tres métodos, se logró actualizar la lista de aves marinas para el Golfo Dulce y publicar los resultados, un estudio que no solamente llena un vacío de información, sino que demuestra los alcances de la ciencia ciudadana cuando es bien manejada.

La ciencia ciudadana puede contribuir convenientemente a la generación de conocimiento, mientras se abordan las dimensiones sociales. Esto resalta la relevancia de proyectos como el Conteo de Aves de Golfito, del cual se obtuvo la mayor parte de los datos para este estudio. El Conteo de Aves de Golfito -un eje del trabajo de Aves de Golfito- es un proyecto de monitoreo anual, apoyado por la participación comunitaria. Permite obtener información para monitorear cambios ambientales en los ecosistemas marino-costeros del Golfo Dulce, y analizar la dinámica poblacional de las aves a largo plazo a nivel local. Este proyecto también promueve que el conocimiento científico debe ser accesible y beneficioso para la comunidad. 

En su próxima visita a Playa Cativo Lodge registre sus observaciones de aves en la plataforma eBird y recuerde que está contribuyendo al monitoreo de las aves marinas del Golfo Dulce. En un tour de kayaking por el manglar del río Esquinas, a hacer snorkelling, a observar ballenas y delfines, o simplemente en su recorrido hacia Playa Cativo notará aves marinas a su alrededor. Comparta sus observaciones de aves a través de eBird con el usuario AvesDeGolfito, o bien, enviando un correo a pajareando@avesdegolfito.org. ¡Su contribución desde el mar es muy valiosa!

Para leer el estudio completo y descargar la lista de especies visite el siguiente enlace: https://checklist.pensoft.net/article/99157/ 

El proyecto Aves de Golfito agradece a Playa Cativo Lodge por dirigir sus beneficios a la comunidad local al ser uno de los principales colaboradores de los Conteos de Aves de Golfito.
 

Por: Alejandra Rojas-Barrantes. Bióloga tropical, intérprete ambiental